Parece en realidad algo extraído de una película de ciencia ficción, sin embargo es así como Wikileaks se ha visto obligado a guardar sus archivos secretos, a los que no pocos les echarían las manos gustosamente.
Wikileaks es una organización internacional sin fines de lucro que se dedica a recopilar y publicar información clasificada de instituciones gubernamentales de varios países que fuentes anónimas hacen llegar al sitio cuyas publicaciones ya han causado conflictos entre estados, expulsión de embajadores, persecución de individuos y grupos y, lo que es aún más alarmante, Wikileaks ha dicho que todavía tiene en su poder información no publicada, que ellos consideran incluso más delicada que la ya conocida.
Al ver el fragmento del video del fortín de Wikileaks, uno no puede sustraerse a una obligada comparación entre cómo se conservaba la información en los tiempos de la gran Biblioteca de Alejandría, que en su época fue el centro que atesoraba la mayor cantidad de información, hasta ahora, cuando ya casi toda la información disponible ha sido digitalizada y compactada en pequeños dispositivos que la almacenan para la eternidad. Largo el camino recorrido pero todavía más curioso y enigmático el que nos falta por recorrer.
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