 |
| Raúl Castro, Presidente de Cuba, en la Cumbre de CELAC en Chile |
El 28 de enero pasado, el diario El Popular de Toronto publicó un artículo titulado "La Guerra Fría: de la OEA a la CELAC", escrito por Alfredo Michelena (http://diarioelpopular.com/2013/01/la-guerra-fria-de-la-oea-a-la-celac/).
El artículo en cuestión ofrece una perspectiva miope, egoísta y errada del proceso emancipador que tiene lugar en Nuestra América. Además está el artículo salpicado con expresiones fabricadas en Washington y Miami, donde ataca a la CELAC y a sus inspiradores, que deja mucho qué decir de su autor.
Nosotros nos dimos a la tarea de escribir una réplica a ese artículo, lo enviamos hoy al Director del diario, Eduardo Ureña para que se publicara, pero solo lo han puesto en la sección de los comentarios debajo del artículo, cosa que podríamos haber hecho nosotros mismos, sin tener que molestar al señor director.
De todas maneras aquí va nuestra réplica, que no fue publicada debidamente como esperábamos en El Popular, pero que sí publicamos nosotros en nuestro sitio con mucho orgullo.
CELAC:
América Latina habla con voz propia
Julio
Fonseca
No
sorprende en lo absoluto que Alfredo Michelena se apoye en inconsistencias
históricas para despotricar contra Cuba, Venezuela y en realidad contra la
nueva América Latina que desangrada e irredenta marcha inexorablemente hacia su
definitiva independencia.
No
sorprende que Michelena defienda un pasado que sabe perdido, pues ya el tiempo
de las oligarquías aliadas a EE.UU. se acabó en Nuestra América. No es extraño
que elementos antidemocráticos y entreguistas se resistan a perder sus
privilegios. Indudablemente les duele que al fin las grandes mayorías oprimidas
y marginadas se sacudan el yugo neocolonial impuesto por potencias extranjeras
y, con voz propia, construyan su futuro sin aquella indeseada injerencia
norteña.
La CELAC,
un mecanismo de integración y concertación política eminentemente
latinoamericano, se solidifica en aras de un desarrollo sostenible y digno, y el
hecho de que Cuba haya sido designada para su presidencia es una muestra de la
reivindicación histórica de la Revolución Cubana y sus líderes. La integración
del Sur es sin duda un jalón en la consolidación de los anhelos de grandes
próceres como Simón Bolívar y José Martí, quien coincidentemente nació un 28 de
enero, día en que se publicó este artículo de Michelena. Quizás él no sepa que
fue Martí quien con claridad política muy avanzada a su época vaticinó el
peligro que significaría el naciente imperialismo estadounidense para la
independencia y soberanía de América Latina, y sentenció que solo la unidad
garantizaría la existencia misma de las naciones sureñas al decir, “… ¡los
árboles se han de poner en fila para que no pase el gigante de las siete
leguas! Es la hora del recuento, y de la marcha unida, y hemos de andar en
cuadro apretado, como la plata en las raíces de los Andes”
La CELAC
también ha decretado el estado de coma irreversible de la hegemonía de EE.UU.
en Latinoamérica, y ha convertido a la OEA, obediente siempre a los dictámenes
de Washington, en un aparato irrelevante; esto lo sabe el imperio y lo saben
los que, queriendo ignorar la historia, se empeñan en detenerla aunque sea a
costa de mentiras y manipulaciones, como es el caso de Alfredo Michelena. Por
eso no sorprende.
No comments:
Post a Comment