Por Andrés Gómez*
El proceso de apelación extraordinaria de Gerardo
Hernández, Ramón Labañino y Antonio Guerrero, tres de los Cinco cubanos que el
gobierno de Estados Unidos arbitraria e injustamente mantiene en prisión, es de
importancia fundamental en el desarrollo de la campaña para lograr obtener su
libertad.
En primer lugar, y por sobre las demás
consideraciones, es que permite y posibilita la solución política del caso. El
caso de los Cinco siempre ha sido un caso político. Así lo planteó, desde el
primer momento, el gobierno de Estados Unidos durante la Administración de
Clinton. Y así lo mantienen planteando los sucesivos gobiernos estadounidenses
desde entonces hasta hoy.
Con la meritoria excepción del fallo unánime del primer tribunal de tres jueces del Tribunal de Apelaciones del XI Circuito el gobierno federal ha logrado avasallar a los tribunales involucrados e imponer su entendimiento de que para el gobierno federal encontrar a los Cinco culpables, imponerle condenas arbitrarias y excesivas, y mantenerlos en prisión es un asunto del más alto interés y de seguridad nacionales.
Con la meritoria excepción del fallo unánime del primer tribunal de tres jueces del Tribunal de Apelaciones del XI Circuito el gobierno federal ha logrado avasallar a los tribunales involucrados e imponer su entendimiento de que para el gobierno federal encontrar a los Cinco culpables, imponerle condenas arbitrarias y excesivas, y mantenerlos en prisión es un asunto del más alto interés y de seguridad nacionales.
En materia de política exterior, desde el final de la
II Guerra Mundial, los tribunales federales de Estados Unidos han accedido a
los requerimientos de la rama Ejecutiva cuando ésta esgrime razones de interés
y seguridad nacionales. Incluso en contra del Derecho y los procedimientos
judiciales establecidos como lo garantiza la Constitución federal. El caso de
los Cinco claramente lo vuelve a demostrar.
Entonces, de la misma manera que el gobierno federal
logró que los tribunales encontraran a los Cinco culpables, ahora, por muchas
razones, algunas evidentes, --en busca de una solución política al caso-- el
gobierno federal pudiera convencer a los tribunales pertinentes que encuentren,
por razones del más alto interés nacional, –ya que las circunstancias han
cambiado— mérito a los sólidos argumentos de la apelación de la defensa de
Gerardo, Ramón y Antonio, y que sean los propios tribunales los que decidan su
libertad. Tal como éstos lo harían si su función fuese lograr que se hiciese justicia.
Y tal como pasó hace catorce años con el caso del niño Elián González, cuando
los tribunales fallaron a favor de devolverle el niño a su padre; hecho que
también ocurrió durante la Administración de Clinton.
Aunque siempre quedaría la opción del perdón o indulto
presidencial para darle solución política a la situación de Gerardo, Ramón y
Antonio. Derecho constitucional de los presidentes de Estados Unidos que éstos
han utilizado miles de veces.
Aunque la posibilidad de la solución política del caso
de los tres de los Cinco aún en prisión a través de una decisión por parte de
los tribunales sería políticamente mucho menos costosa para el presidente
Obama, un presidente cuyo capital político ha menguado considerablemente, su
gobierno está asediado con graves crisis internacionales de más premura para su
país, y, además, que ha extensamente demostrado durante su gestión de gobierno
que no se inclina a arriesgarse políticamente.
Entonces, ¿es o no es un factor de importancia
fundamental en el desarrollo de la campaña para lograr obtener la libertad de
Gerardo, Ramón y Antonio el proceso de apelación extraordinaria de los tres
actualmente ante los tribunales?
Mantener la campaña internacional a favor de la
libertad de los Cinco viva y creciendo –como se ha logrado-- siempre ha sido un
gran reto. De aquí en adelante lo será aún más. Para mantenerla y profundizarla
tenemos que basarnos en argumentos sólidos que demuestren la injusticia que se
ha cometido y que se comete --y por qué se ha cometido y se comete--, ahora en
contra de los derechos fundamentales de tres de los Cinco.
Tenemos que basarnos en la denuncia constante de la
política de terrorismo de Estado de Estados Unidos mantenida contra el pueblo
cubano y su Revolución durante más de 55 años con el propósito de hacerlo
rendir, por la fuerza más vil, su independencia así como sus libertades y
derechos más queridos, política que muy caro le ha costado al pueblo cubano en
miles de muertos, discapacitados y de innumerables sufrimientos, para así
lograr convencer a personas conscientes y comprometidas políticamente como
también a otros muchos que no lo están pero que son personas de buena voluntad
que en todo el mundo existen.
Nunca debemos de olvidar que esa es la razón por la
cual los Cinco estaban infiltrados en las organizaciones terroristas de la
extrema derecha cubana que desde Estados Unidos han ejecutado esa despreciable
política. Y es la razón por la cual los arrestaron, intentaron someter, y a los
que han mantenido por tan largos años en cruel prisión.
No comments:
Post a Comment